PROYECTO AMAR
El proyecto AMAR marcha viento en popa.
Desde que empezamos esta aventura hemos ido creando las hojas de nuestros árboles del amor a través de los cuentos que hemos leído cada semana, éstos son algunas de las enseñanzas que hemos aprendido durante estas semanas.
Ser dulce es tratar a los demás con
delicadeza y afecto.
Que te limpien una herida con suavidad es
un gesto dulce de cuidado.
Al sentirnos cuidados, nos invade la certeza
de que nos tienen en alta estima.
La estima nace de la cercanía y nos mueve
a la dedicación.
Una forma de hacer que la vida de aquellos
a quienes amamos sea realmente grata es
escuchándolos.
Cuando alguien te escucha, te dedica su
tiempo, muestra interés por ti y ganas de
comprenderte. Escuchar es, pues, un acto
de generosidad.
Si das porque te sientes presionado,
la generosidad se desvanece. Para que
disfrutes de dar sin esperar nada a cambio,
debes hacerlo con libertad.
Cuando amas a alguien, te esfuerzas por
su bienestar; eso requiere voluntad.